miércoles, 12 de enero de 2011

“60.000 MILLAS A VELA”

Un interesante libro que me han traído los reyes magos, escrito por Françoise Moitessier y que he devorado con avidez.
Casi cualquier libro en el que se narran experiencias de navegantes, sus viajes y reflexiones me resulta apasionante, pero este tiene el valor añadido de aportar un segundo punto de vista de la travesía que entre los años 1963 y 1966 Françoise y Bernard Moitessier realizaron a través del Mediterráneo, el Atlántico, el Pacífico y de vuelta al Atlántico a través del Cabo de Hornos.
No repara tanto en los detalles y carece de la mística narrativa de la que Bernard hace gala en “Cabo de Hornos a la vela”, pero es interesante la visión de una mujer que sobre la marcha iba aprendiendo los secretos de la navegación a vela de la mano de uno de los mejores maestros, llegando a ser junto a él prácticamente una unidad a bordo del Joshua.
No obstante, el libro sirve también para desmitificar la figura de un navegante que muchos, casi todos, tenemos en un pedestal, mostrando su humanidad con sus defectos y virtudes, quizá también ayuda a entender mejor las decisiones y forma de actuar de este mítico navegante.
Narra sus vidas desde que después del segundo naufragio de Bernard con el Marie Thérese II se reencuentran en Francia, se casan y deciden irse a navegar por el mundo a bordo de su recién construido Joshua. Cómo vive ella desde Francia la nueva partida de Bernard en la Golden Globe y su decisión de renunciar a volver a Europa para dar media vuelta al mundo más y quedarse en Tahití, así como su distanciada relación hasta la muerte de Bernard.
Françoise aprendió de él el amor a la mar y a la libertad que en ella encontraron, hasta tal punto que años más tarde decidió construirse su propio barco, el Croc-Blanc, y partir, en principio en solitario, hacia los mares de Asia. Una rápida e interesante visión de la vida de Françoise Moitessier de Cazalet, una mujer singular, valiente, aventurera, apasionada de la mar, la libertad y en definitiva de la vida.

9 comentarios:

Aniña (@vampyevil) dijo...

me lo pido pero ya!!
un besito y gracias por compartirlo ::P

Nautijorge dijo...

Muy recomendable, Aniña. Te gustará.
Bicos

Isabel Martínez Rossy dijo...

¡Que buena pinta tiene este libro!... tomo nota

mera dijo...

Bernard Moitessier y Joshua Slocum fueron siempre dos ídolos para mi. Slocum, viudo y sin curre lo tenía más fácil, y su aventura con casi setenta años y en 1895 o así, es acojonante. Mdme. Moitessier le pone un lado humano (las tuvo que pasar putas)al semidios de todos los chapuzas náuticos. Muy bien Jorge, lo leeré y espero que la albañilería me deje dos días libres para conocerte y comentarlo. Practique Ud. señor la elegancia social de la visita en días de mal tiempo.

Nautijorge dijo...

Me siento identificado con los chapuzas náuticos.
José Antonio, en cuanto lo leas y la economía doméstica me dé para abonar el correspondiente atraco de autopistas del atlántico y la sopa para el auto, o mejor aún, el billete de ferrocarril (porque lo de ir en barco está cada vez más jodido), practicaré la elegancia social de la visita y charlaremos sobre lo divino y lo humano, eso sí, lo del mal tiempo no te lo garantizo.

Nordes dijo...

"Un Vagabundo de los Mares del Sur" me enganchó a Bernard Moitessier, hace muchiisimos años.... No hubo otro libro igual, leí el resto y me gustaron también, pero nada como el primero, quizás porque fue el descubrimiento de un tipo de vida...

Vito Dumas también tiene su miga como aventura...

Y no olvidemos a Julio Villar y su aventura narrada en "eh, petrel"

Este libro que me presentas, tendrá que caer también en mis manos :)))

Saludos!

Nautijorge dijo...

Quizá, Nordés, este sea uno de los últimos relatos sobre los navegantes clásicos, pero cuando se crean demasiadas espectativas sobre algo a veces acaba defraudando. Espero que no sea el caso.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Manu. Lo leí hace algun tiempo y no tiene nada que ver con el flipao de su marido. Moti es un monstruo irrepetible, en Tamata describe su infancia y me cautivó. hace poco he leido "Mi cuna, el mar" una perla que aconsejo leerla.
Vientos de salitre a todos.

Nautijorge dijo...

He oido hablar de Joan Lowell.
Tomo nota, Manu.
Gracias