viernes, 18 de mayo de 2007

LA LEYENDA DE SAN BRANDÁN

Aunque se me ha pasado en un par de días la fecha de la fiesta de San Brandán, y ya que he hablado de él, quiero dejar constancia de este gran navegante del que tanto se ha escrito a lo largo de los siglos, y del que ha quedado tanta iconografía. Brandán el Navegante (Ciarraight Luachra, Irlanda, c. 484 - Enachduin, c. 578), también llamado Brendán, Brandano, Barandán o Borondón, fue uno de los grandes monjes evangelizadores irlandeses del siglo VI. Abad del monasterio de Clonfert (Galway, Irlanda) que fundó en el 558 ó 564, fue protagonista de uno de los relatos de viajes medievales más famosos de la cultura celta medieval, relatado en la Navigatio Sancti Brandani, una obra que fue redactada en los siglos X u XI.
La leyenda de su viaje se extendió durante siglos por la Europa cristiana; de acuerdo con la citada Navigatio partió el 22 de marzo del 516 con otros diecisiete monjes en un barco para buscar el Paraíso Terrenal. Después de un largo viaje, recaló en un mar lleno de islas; la identidad de éstas ha sido motivo de controversias, y se ha afirmado que posiblemente se tratara de la Terranova —lo que haría de Brandán quizá el primer europeo en llegar a América—, también se la identifica con las islas del mar Caribe o las islas Canarias (España). La leyenda cuenta que los monjes celebraron una misa de resurrección en una isla que resultó ser una ballena, y ahí nació la leyenda de la isla errante en las aguas del Océano Atlántico. La Isla de San Brandán era una ínsula completamente desprovista de vegetación en la que decidieron encender una hoguera para calentarse. Cuando se sentaron en torno al fuego se estremecieron al comprobar cómo la isla comenzó a moverse. Se dirigieron precipitadamente hasta su barco y se alejaron rapidamente de ella. Se trataba, en realidad, de la ballena gigante Jasconius.
La Iglesia Católica lo honra como santo; es el patrón de los marinos, celebrándose su fiesta el 16 de mayo.En esa fecha del año 1976, cuatro navegantes irlandeses comandados por Tim Severin construlleron un barco de cuero con armazón de madera, siguiendo las especificaciones de los antiguos monjes navegantes irlandeses, y realizaron la travesía hasta Terranova, saliendo de Irlanda y pasando por las Islas Feroe, Islandia y Groenlandia, en conmemoración del viaje original de San Brandán y reivindicando el descubrimiento de América por el monje.
Por esas mismas fechas hubo otro proyecto casi igual en La Coruña, pero la travesía fracasó. De todas formas, ya sólo la construcción del barco debió ser una experiencia interesante, y pone de manifiesto, aún más, la proeza de aquel irlandés y sus diecisiete tripulantes.

5 comentarios:

caius dijo...

Yo que tuve una novia irlandesa (auqnue eso es otra historia) puedo aportar dos datos de interés: primero, que son gente recia capaz de cualquier proeza (po rejemplo aguantarme), segundo, que les gusta joder la siesta al personal como hizo el San Brandán con la ballena (también podría ser llamado San Amosanda, pero eso también es otra historia).
Gracias por contarnos esto, nunca te acostarás sin saber algo neuvo (bueno, a mi me ha pasado un par de veces)...

Freeman Seagull dijo...

Que interesante esta historia, desconocía la existencia de este santo, en fin...como dice Caius "no te acostarás sin saber algo más"

Unknown dijo...

Estimado Jorge, habiendo leído tu post referente a San Brendan, quisiera agregar un par de cosas a modo de comentario y, de paso, para abonar la leyenda con datos interesantes.
Te comento que estoy escribiendo desde Argentina, más exactamente desde la ciudad de La Plata, 50 kilómetros al sur de Buenos Aires.
Nuestra provincia tiene una gran bahía llamada "Bahía de Samborombón". Según un historiador local, este toponimio proviene de una deformación de San Brendan, quién según esta teoría, una vez arribado a América, más exactamente a la Península del Labrador, continuó su viaje hacia el sur costeando el continente, hasta terminar en estas lejanas e ígnotas latitudes.
En un crucero que hice con mi velero a la ciudad de Colonia del Sacramento, ubicada en la República Oriental del Uruguay, tuve oportunidad de ver la reproducción de un mapa francés del siglo 17, en el que efectivamente el Río Samborombón, afluente de la Bahía antes mencionada, es denominado como Río de "San Brendano".
Espero que el dato te aporte algo más, aunque obviamente es sólo una teoría.
Buenos vientos y mucha agua bajo la quilla.
Waldo Mullen
La Plata, Argentina
waldomullen@gmail.com

Nautijorge dijo...

En esta ocasión también yo me acostaré sabiéndo una cosa más ;-)
Gracias Waldo. Sin duda eso confirma que San Brandán debió ser un gran navegante y que llegó bien lejos.

Anónimo dijo...

Yo vi el barco de Tim Severin en Irlanda, cerca de Limerick, en un parque que reflejaba la vida de los irlandeses desde la edad de bronce. Me impresionó mucho la proeza de aquella gente ( teniais que haber visto el barco )