La climatología este verano por Galicia está algo inestable, pero a pesar de todo se puede decir que gozamos de buen tiempo, con una mar muy tranquila aunque con escaso viento. Lo máximo que llegamos a tener fue unos 10 ó 12 nudos de viento, y aunque hicimos un par de intentonas de navegar sólo a vela en seguida bajábamos de los 3 nudos de velocidad, así que tuvimos que conformarnos con navegar con génova, mayor y motor, a veces simplemente con motor y mayor.

En esta ocasión también salimos tarde y nos anocheció pasadas las islas Sisargas, amaneciendo después de pasado Cabo Fisterra. La noche transcurrió tranquila, bajo la única iluminación de nuestras luces de navegación y la de miles de estrellas que a ratos se dejaban ver.Gracias al buen estado de la mar, a la transparencia del agua y a contar con un buen fotógrafo a bordo, pudimos retratarlos bien como se aprecia en estas fotos, cortesía de mi tocayo Jorge Cabanero.

Entramos en la ría de Vigo con un estupendo día y un incipiente viento que para nosotros llegó tarde, pero pudimos disfrutar de un buenísimo almuerzo a bordo por cuenta de la familia de algún tripulante ;-). Después, como casi siempre, vuelta a la civilización urbana, donde ni el sol, ni el viento, ni el mar se aprecian de la misma manera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario