Ericsson 4 lanzado hacia Ciudad del Cabo

Si la mar no los para, como le ha ocurrido al Telefónica Negro, los muchachos del Ericsson 4 pueden llegar a Ciudad del Cabo en cabeza dentro de un par de días.
Después de la dureza de las últimas jornadas supongo que lo estarán deseando.

¡Qué apetecible!

Pep y Xavi, a bordo del Telefonica azul, entran de guardia... Qué apetecible, verdad?

VELOCIDAD DE HIPERESPACIOOO!!!!

Al parecer la pasada noche en el Atlántico sur ha debido ser movidita, con vientos que superaban los 40 nudos y olas de más de 6 ó 7 metros de altura. Condiciones que ha aprovechado bien el Ericsson 4 machacando su propio record y dejándolo en la barrera de las 600 millas en 24h.!!!... ¡¡¡CRAKA!!!
Algo así como ir de Barcelona hasta Cádiz, o de La Coruña hasta Tarifa en un día y a vela… ahí es ná! Se han llegado a alcanzar velocidades de 36 nudos… que con una mar principal que viene de popa y una mar secundaria del través hace realmente difícil gobernar estas máquinas de 70 pies de eslora, tanto es así que por ejemplo el Telefónica Negro, durante la pasada noche, ha perdido el control en 15 ocasiones. QUINCE GALLETAS! como quince panes que han traído como consecuencia tres spis rotos, desperfectos en la vela mayor y, en una de ellas, verdaderamente gorda, ha supuesto la rotura de uno de los timones amén de la desaparición del bauprés y una de las orzas de deriva… Buff!!!
Evidentemente esto les ha hecho perder mucho tiempo, y tras la reparación del timón continúan navegando pero a menor velocidad que sus contrincantes.
¡Menudo stress!... constantemente mojados, con guardias de seis horas, “comida” liofilizada y a la hora de “descansar” hay que imaginarse los golpes y el ruido en el interior del barco producido por agua a esa velocidad bajo el casco y sobre cubierta (más que barcos parecen submarinos) y los pantocazos… que debe dar la sensación de estar dentro de un tambor gigante, a lo que hay que sumarle, cuando se va de orzada, una inclinación de 90º y el estrépito de las velas flameando… como para que te salga la adrenalina por las orejas ;-)

RECORD A TODO TRAPO

La flota de la Volvo Ocean Race ya ha cogido el tren de borrascas del Atlántico Sur, encontrando vientos de gradiente de entre 35 a 40 nudos que les llevan directos hacia Ciudad del Cabo a velocidades de vértigo, alcanzando puntas de más de 26 nudos. De hecho el Ericsson 4, patroneado por Torben Grael, ha pulverizado, la pasada noche, el record de singladura con 585 millas, colocándose en cabeza de la flota. Record que poseía el ABN AMRO 1 en la anterior edición habiendo recorrido 563 millas en 24h.
Los tripulantes ya han tenido que sacar los trajes secos y los cascos para hacer frente a los fuertes rociones de agua que barren la cubierta y a los pantocazos que se producen constantemente a esas velocidades. Los Ericsson han puesto el turbo, al igual que Puma y Green Dragon, a ver si los Telefónica aprietan ya el acelerador para no quedarse atrás, porque ahora en la flota el que no corre vuela.Yiiiiiiih Haaaaaa... Mi jacaaa galopa y corta el viento cuando pasa por el Puerto caminí to de Jerez... ;-)

AUN RUMBO SUR

La flota de La Volvo OR sigue haciendo rumbo sur, a lo largo de la costa de Brasil, tras haber dejado por popa la isla de Fernando de Noronha , con intención de bordear el anticiclón de Santa Elena, antes de poder virar al oeste hacia Ciudad del Cabo y cruzar de nuevo el Atlántico Sur.
Atrás quedaron las calmas ecuatoriales y el ecuador, al paso del cual, una vez más, se celebró la tradicional ceremonia de ofrenda al dios Neptuno para los “novatos”. Una particularidad de esta edición es que los participantes cruzarán esta línea imaginaria en cinco ocasiones. En muy poco tiempo han pasado de arrastrarse por las calmas a volver a patinar veloces. Gran remontada del Telefónica Negro que se ha echado encima de la cabeza de la flota al no haber necesitado hacer repiquete para pasar la puerta de Fernando de Noronha, como tuvieron que hacer los tres que tenía delante. Otra peculiaridad es la tremenda igualdad entre los participantes, que después de cuatro mil millas siguen navegando en un pañuelo, lo que provoca las constantes alternancias en la cabeza de la flota. De seguir así necesitarán “foto finish” en la meta de Sudáfrica.

AMANECERES Y ATARDECERES

Momentos reconfortantes en el mar, que se repiten todos los días y que sin embargo nunca me pasan desapercibidos. Nada que ver una instantánea hecha al sol cuando sale o se pone con el momento visto “in situ”, no sé por qué pero las fotos siempre quedan cursis, y sin embargo no puedo evitar hacer una foto, o varias, en el momento en que Lorenzo aparece después de las horas de oscuridad o cuando se despide al final de la jornada.
Es difícil resistirse a mirar al sol en esos momentos, a pesar de que siempre es igual, nunca es lo mismo, cada una de ellas tiene su peculiaridad y su magia.
Aquí una pequeñísima muestra de las despedidas y saludos al sol vividos a bordo durante este verano.

UN AUTENTICO CENIZO

Una más para la lista del ilustre navegante solitario inglés Alex Thomson. El pasado viernes de madrugada, a falta de una milla para entrar en el puerto francés de Sables d´Olonne a donde se dirigía para tomar parte en la próxima regata de vuelta al mundo en solitario Vendée Globe a bordo de su flamante “Hugo Boss 2”, un pesquero francés se lo llevó por delante abordándole por su banda de estribor y provocando la rotura del mástil, aunque afortunadamente ninguno de los tres tripulantes que se encontraban a bordo ni los del pesquero han sufrido daños. El que si ha sufrido daños ha sido el “Hugo Boss 2”, que además de la rotura del palo de carbono tiene importantes daños en su banda de estribor, lo que pone en peligro su próxima participación en la Vendée, a pesar de que según las propias declaraciones de Thomson tratarán de estar en la línea de salida. Ya desde hace algún tiempo que considero a este navegante como un auténtico cenizo. En la edición de 2004 de la Vendée Globe tuvo que retirarse en Ciudad del Cabo por la rotura de sus timones. Pero bueno, esto es algo hasta cierto punto frecuente y le puede pasar a cualquiera.
En la edición 2006 de la Velux 5 Oceans tuvo que abandonar el barco a unas 1000 millas al sur de Cabo de Buena Esperanza por graves problemas estructurales en la quilla del “Hugo Boss 1” que terminó hundiéndose… pero lo peor del caso es que en esa ocasión fue su compatriota Mike Golding a bordo del “Ecover” quien tuvo que dar la vuelta para rescatarlo y, 24 horas más tarde de tenerlo a bordo, el “Ecover” desarboló y tuvo que retirarse de la regata. En la pasada edición de la Barcelona World Race participaba junto a Andrew Cape a bordo también del recién estrenado “Hugo Boss 2”, teniendo que hacer una recalada de emergencia de nuevo en Ciudad del Cabo y de nuevo por problemas en uno de sus timones. Recordemos además que el pasado junio participó en la regata de la vuelta a la Isla de Wight, al sur de Inglaterra, recibiendo a bordo del “Hugo Boss2” al “figura” de la F1 Lewis Hamilton que tras unas rápidas instrucciones de Thomson se hizo con el timón del barco y minutos después abordaban a otro participante, con el resultado de daños en el “Hugo Boss2” por valor de unos 60.000 euros. Y ahora esto… ¿Es o no es un cenizo el bueno de Thomson?

Y a pesar de todo su sponsor, la marca Hugo Boss, está encantada con él... y es que a veces las calamidades son más rentables que los triunfos.

P.D. Se rumorea que una vez Thomson subió a bordo del malogrado VO70 "Movistar"... pero está sin demostrar ;-)